Entretenida con las tareas del hogar, de pronto me llamó la atención una corneja que se posó en el alféizar exterior de mi ventana. Me detuve y la observé. Llevaba una bellota en el pico. La depositó cuidadosamente en el tiesto despoblado y triste, pero lleno de tierra, que tenía delante de ella. Se quedó un ratito allí, observándolo todo con sus ojitos azabache, que parecían dos cuentas de cristal brillante, como las de mi collar. Disfruté del apacible momento, muy quieta para que la corneja no se asustara.
Qué curiosa forma tienen las aves de mover la cabeza, con esos pequeños movimientos entrecortados y robóticos. Tras un ratito de reflexión, decidió echar a volar sin su bellota, que allí quedó, reluciendo en un tiesto yermo, gris y frío.
∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴ Pasaron unos días ∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴∴
Abrí la ventana y encontré intacto aquel pequeño regalo. Me disculpé mentalmente con la corneja, por la tardanza en aceptarlo. Le clavé unos palillos y lo metí en un vaso con agua, igual que hago con los huesos de aguacate. Pero era invierno y la bellota hibernaba.
Cuidándola pacientemente llegó la primavera y la bellota echó una raíz larga y rizada y, con el benévolo sol que le hemos robado a España para traérnoslo a Berlín en época de pandemia, de la preciosa semilla brotó un tallo con hojitas.Esta encina bebé crece en mi alféizar. Pronto la sacaré de su cuna y la meteré en tierra.
Es el primer buen regalo que me hace un animal. Al contrario de los cadáveres de ratoncillos y pajarillos que, tan orgullosos, se empeñaban en traerme mis gatos como presente.
¡Por fin alguien tiene en cuenta que soy vegetariana!
FIN
PD.: España se ha vuelto a llevar el sol, nos ha quitado la pelota.
PD.: La acuarela de mi amiga corneja está disponible para adquisición.
16 x 15 cm. Interesados contactar aquí.
m’encanta!!! Besos guapa 🙂
Gracias, ¡me alegro!
Que bonita historia!
Espero que la encina te traiga algo del calor y el cielo azul de Extremadura,
Cuídala y cuídate
Un abrazo fuerte
¡Muchas gracias! Sí, yo también lo espero. Que mi balcón berlinés se convierta en un rincón extremeño, estaría bien 😀
Me ha encantado el cuento de la Corneja y la bellota.
Es bellísimo emocionante y con final feliz.
Puedes presentarlo a un concurso de relatos cortos.
Suerte en todo